El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha señalado en el XVI Encuentro Financiero Expansión-KPMG celebrado en Madrid, que el crecimiento del consumo interno en Europa es débil y se sitúa por debajo de las previsiones. Esta situación se debe, en gran medida, a la falta de confianza de los consumidores.
Guindos, al abrir el encuentro, destacó que el consumo interno «debería haber sido el principal factor de crecimiento de la economía de la zona del euro». A pesar de que se ha registrado un incremento en la economía real, acompañado de una menor inflación, el crecimiento del consumo no ha alcanzado las expectativas proyectadas.
Además, ha indicado que los europeos perciben la necesidad de reducir la ratio entre déficit y PIB, así como el incremento de gastos en defensa. En algunos casos, la falta de presupuesto podría llevar a los gobiernos a implementar recortes, lo que impactaría negativamente en el estado del bienestar.
Prioridad en Europa: defensa ante la amenaza de Rusia
«Europa está en un momento complejo, en una encrucijada», ha afirmado Guindos, señalando que la defensa europea frente a la amenaza de Rusia se ha convertido en una prioridad.
Un aspecto adicional que ha afectado la evolución de la economía europea, según el vicepresidente del BCE, ha sido el acuerdo arancelario con Estados Unidos. Este pacto ha dejado un sabor «agridulce», al haber evitado una guerra comercial, pero sin impedir un aumento notable en las tarifas arancelarias.
A pesar de los desafíos, existen elementos positivos en el segundo semestre del año. Guindos ha reafirmado que los tipos de interés se encuentran en un nivel «adecuado», y la evolución de la inflación, especialmente en servicios, es muy satisfactoria.
Asimismo, ha resaltado la mejora en la rentabilidad de la banca europea, con un ROE (rentabilidad por recursos propios) superior al 12 %. Esta mejora se ha reflejado en valoraciones que son «las más altas desde la crisis financiera» y que han permitido «cerrar la brecha con Estados Unidos».
Sin embargo, Guindos también ha advertido sobre los riesgos asociados a estas altas valoraciones, indicando que «descuentan un escenario muy benigno», en el que las primas de riesgo son «muy estrechas». Esto podría ser un indicio de que los mercados no están considerando adecuadamente los «riesgos geopolíticos» actuales.






