Madrid, (EFE).- España ha enviado a la Comisión Europea (CE) un nuevo plan de vacunación de emergencia contra la dermatosis nodular contagiosa, con el objetivo de vacunar a cerca de 456.000 bovinos de 2.849 explotaciones en diversas comarcas de Cataluña y tres comarcas aragonesas. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) informó sobre este nuevo plan durante la reunión del Comité de la Red de Alerta Sanitaria Veterinaria de España (Rasve) que se llevó a cabo el pasado martes.
Vacunas suficientes
El plan contempla la vacunación de 369.323 animales pertenecientes a 2.164 ganaderías en Cataluña, así como 86.386 reses de 685 explotaciones en Aragón. Según el Ministerio de Agricultura, hay suficientes vacunas para implementar este nuevo plan, gracias a compras de emergencia aprobadas por un valor de 660.000 euros en la misma sesión del Consejo de Ministros.
El ministerio confía en una respuesta favorable de la CE
El ministerio espera que la CE responda «en las próximas horas o días», y confía en que lo haga de manera positiva. Esta expectativa fue expresada por Emilio García, director general de Sanidad de la Producción Agroalimentaria y Bienestar Animal, durante un encuentro informativo telemático.
Nueva zona de vacunación
Se ha establecido una nueva zona de vacunación, denominada ‘zona I’, que actualmente está libre de focos de la enfermedad. Esta área servirá para formar un cinturón que delimitará la ‘zona II’, que está afectada por algunos de los 18 focos conocidos o por las restricciones impuestas en la provincia de Gerona. En la zona afectada hay actualmente 2.003 explotaciones y 152.000 reses que son susceptibles de vacunación. Además, el plan enviado a Bruselas incluye una zona de perivacunación que estará bajo «vigilancia extrema pero sin restricciones».
Coordinación entre administraciones
García ha destacado la buena coordinación entre la Generalitat catalana y el Gobierno central, señalando que los técnicos «han aprendido a manejar la enfermedad en tiempos relativamente buenos». En relación a la suspensión de ferias y muestras ganaderas, que ya se ha implementado en algunas comunidades autónomas, Agricultura considera que es una medida «razonable», siempre que se ajuste a la normativa europea vigente. Además, estas cancelaciones pueden tener un «efecto de mentalización» entre los ganaderos.
Finalmente, España mantendrá informados a sus socios comerciales sobre la gestión y los avances en la lucha contra esta enfermedad, con el objetivo de «ver si a medio plazo» se puede lograr una reapertura que acepte la regionalización del problema.






