El banco JPMorgan Chase ha anunciado una inversión de hasta 10.000 millones de dólares como parte de un plan para movilizar 1,5 billones de dólares, destinado a financiar e invertir en industrias cruciales para el crecimiento de la economía estadounidense, tales como defensa, energía y manufactura.
En un comunicado, la entidad destacó que la inversión directa de 10.000 millones de dólares se canalizará hacia empresas consideradas esenciales para la seguridad nacional de Estados Unidos, en un esfuerzo por proteger la economía del país ante el aumento de las tensiones comerciales con naciones como China.
Este anuncio se produce tras la previa declaración del banco, según la cual se movilizaría un billón de dólares en la próxima década para apoyar estas industrias críticas; además, se ha decidido aumentar el tamaño del paquete en un 50 %.
Las acciones de JPMorgan, el mayor banco de EE. UU., subieron un 2,2 % en los primeros minutos de la sesión después de este anuncio, justo en un momento en que la administración de Donald Trump busca modernizar infraestructuras y reducir la dependencia de las cadenas de suministro extranjeras, especialmente en sectores como el farmacéutico, semiconductores, energías limpias y tierras raras.
Sectores estratégicos en la inversión
Con esta nueva iniciativa de seguridad y resiliencia, JPMorgan promete facilitar la financiación e inversión en cuatro sectores estratégicos: cadena de suministro y manufactura; defensa y aeroespacial; independencia energética; y tecnologías de vanguardia como inteligencia artificial y computación cuántica.
Jamie Dimon, presidente de la entidad, comentó que en el apartado de defensa se incluirán inversiones en drones, conectividad de última generación y comunicaciones seguras. En el ámbito energético, se defienden la independencia energética y resiliencia, incluyendo proyectos de almacenamiento de baterías. La inversión en tecnología se centrará en inteligencia artificial, ciberseguridad y computación cuántica.
Adicionalmente, habrá un enfoque en cadenas de suministro y fabricación avanzada, abarcando minerales críticos, precursores farmacéuticos y robótica.
Dimon subrayó que «ha quedado dolorosamente claro que Estados Unidos se ha vuelto demasiado dependiente de fuentes poco fiables de minerales, productos y manufacturas críticas, todos esenciales para nuestra seguridad nacional».
Importancia de las tierras raras globales
Este plan de inversión llega en un contexto de crecientes tensiones comerciales entre China y Estados Unidos, donde Trump amenazó con imponer aranceles del 100 % a productos chinos y más restricciones a la exportación de tecnología, en respuesta a las nuevas medidas de China, que incluyen restricciones a la exportación de tierras raras.
La administración de Trump busca que las empresas estadounidenses inviertan en sectores críticos. JPMorgan también ha iniciado operaciones colaborativas con la empresa de minería de tierras raras MP Materials para aumentar la producción de estos materiales decisivos.
China, que posee el 49 % de las tierras raras del planeta (aproximadamente 44 millones de toneladas), controla más del 70 % de la producción mundial y casi el 90 % de su procesamiento. Dimon ha instado a la acción para «afrontar estos inmensos desafíos», asegurando el apoyo del banco a estas industrias para «garantizar el acceso confiable a medicamentos vitales y minerales esenciales», así como para «defender nuestra nación» y «construir sistemas energéticos para satisfacer la demanda impulsada por la IA y promover tecnologías como semiconductores y centros de datos».






