El Consejo Regulador de Rioja espera que este año 2025, en el que se cumple el centenario de la Denominación de Origen Calificada (DOCa), sea una añada memorable por su «extraordinaria calidad». Así lo ha manifestado Alejandra Rubio Gil, directora del Órgano de Control del Consejo Regulador de la DOCa Rioja, en una reciente entrevista, destacando que, a pesar de la alta calidad, se prevé que la producción sea aproximadamente un 20 % inferior en volumen de kilos de uva recogidos en comparación con el año 2024.
Pilar Mazo, desde Logroño, reporta que el Consejo Regulador ha expresado su satisfacción por la calidad de la uva recogida. Según Rubio Gil, se han recibido «unos vinos aromáticamente limpios, sin perfiles herbáceos». Hasta la fecha, se habían recogido 219 millones de kilos de uva, de los cuales 185 millones son de variedades tintas y aproximadamente 36 millones de blancas. Estos datos fueron proporcionados por la directora en el pleno del Consejo Regulador, que se celebró recientemente.
Producción y Expectativas
La cosecha en 2025 será corta en producción, y se estima que será un 20 % inferior a la de 2024, que alcanzó los 276,4 millones de kilos de uva, de los cuales 275,1 millones estaban amparados por la DOCa. En total, las 66.797 hectáreas de viñedo de la DOCa se extienden por La Rioja, País Vasco y Navarra, donde operan alrededor de 13.000 viticultores y unas 600 bodegas.
A pesar de la corta producción, la temporada ha sido larga en desarrollo, ya que la recogida de la uva blanca en la zona oriental de la Denominación comenzó el 13 de agosto y se espera que supere los dos meses de campaña. La meteorología ha favorecido también la evolución de la uva, con mínimas lluvias, lo que ha permitido que la recogida se prolongue gracias a un clima favorable.
Desafíos en la Cosecha
La recta final de la cosecha ha traído consigo ciertos desafíos, como problemas de fertilidad, la ocurrencia de cosechas en verde, los efectos nocivos del mildiu y el pedrisco en diversas zonas de Rioja, lo que ha contribuido a la reducción de rendimientos. En este contexto, Rubio Gil ha elogiado «la profesionalidad y esfuerzo de los viticultores» durante todo el ciclo vegetativo y la recolección.
Es importante señalar que los ataques de mildiu fueron controlados, lo que permitió que, tras el envero, esta enfermedad fúngica no afectara a la uva. Como resultado, la uva ha llegado en excelentes condiciones sanitarias y vegetativas a las bodegas, donde saben aprovechar las cualidades de esta buena uva para elaborar vinos de renombre.
Actualmente, todavía hay algo de uva por recoger, concentrada en las zonas más altas de Rioja Alta y Alavesa, y se espera que se complete la vendimia en la próxima semana.
Calidad Excepcional
El Consejo Regulador comunicó el pasado martes, 7 de octubre, el cierre de la vendimia. Sin embargo, esto no implica que todas las uvas hayan sido cosechadas, ya que aún quedan algunos viñedos pendientes. Todos los parámetros de calidad y analíticos que se han desarrollado durante los controles de maduración en la vendimia apuntan a una «calidad extraordinaria de la uva», con indicadores de madurez fenólica e intensidad colorante muy adecuados.
Concluida la vendimia, comenzará el trabajo de recogida de muestras en las bodegas para calificar los vinos de esta cosecha, actividad que se prevé iniciar el próximo mes de noviembre.






